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19 de diciembre de 2012

"No temas, Zacarías, porque tu ruego ha sido escuchado: tu mujer Isabel te dará un hijo, y le pondrás por nombre Juan¨

Del santo Evangelio según Lucas 1,5-25
En tiempos de Herodes, rey de Judea, había un sacerdote llamado Zacarías, del turno de Abías, casado con una descendiente de Aarón llamada Isabel. Los dos eran justos ante Dios, y caminaban sin falta según los mandamientos y leyes del Señor. No tenían hijos, porque Isabel era estéril, y los dos eran de edad avanzada.

Una vez que oficiaba delante de Dios con el grupo de su turno, según el ritual de los sacerdotes, le tocó a él entrar en el santuario del Señor a ofrecer el incienso; la muchedumbre del pueblo estaba fuera rezando durante la ofrenda del incienso. Y se le apareció el ángel del Señor, de pie a la derecha del altar del incienso. Al verlo, Zacarías se sobresaltó y quedó sobrecogido de temor. Pero el ángel le dijo: "No temas, Zacarías, porque tu ruego ha sido escuchado: tu mujer Isabel te dará un hijo, y le pondrás por nombre Juan. Te llenarás de alegría, y muchos se alegrarán de su nacimiento. Pues será grande a los ojos del Señor: no beberá vino ni licor; se llenará de Espíritu Santo ya en el vientre materno, y convertirá muchos israelitas al Señor, su Dios. Irá delante del Señor, con el espíritu y poder de Elías, para convertir los corazones de los padres hacia los hijos, y a los desobedientes, a la sensatez de los justos, preparando para el Señor un pueblo bien dispuesto."

Zacarías replicó al ángel: "¿Cómo estaré seguro de eso? Porque yo soy viejo, y mi mujer es de edad avanzada." El ángel le contestó: "Yo soy Gabriel, que sirvo en presencia de Dios; he sido enviado a hablarte para darte esta buena noticia. Pero mira: te quedarás mudo, sin poder hablar, hasta el día en que esto suceda, porque no has dado fe a mis palabras, que se cumplirán en su momento." 

El pueblo estaba aguardando a Zacarías, sorprendido de que tardase tanto en el santuario. Al salir no podía hablarles, y ellos comprendieron que había tenido una visión en el santuario. Él les hablaba por señas, porque seguía mudo. Al cumplirse los días de su servicio en el templo volvió a casa. Días después concibió Isabel, su mujer, y estuvo sin salir cinco meses, diciendo: "Así me ha tratado el Señor cuando se ha dignado quitar mi afrenta ante los hombres". (Aciprensa.com)

Comentario:

Hay muchas semejanzas en los relatos de la infancia de Lucas, entre el nacimiento de Juan el Bautista y el de Jesús. También hay diferencias significativas. La primera lectura de la Misa, el nacimiento de Sansón, también, nos proporciona un prototipo para la historia del Evangelio de hoy .

Hoy leemos acerca de la anunciación a Zacarías, acerca del nacimiento de un hijo de su anciana esposa, quien ya ha pasado la edad de concebir. Es evidente que se trataba de un nacimiento que, en circunstancias normales, no debería haber ocurrido. En una sociedad donde tener hijos, y en especial varones, era el deber principal de una esposa por ello, ser incapaz de tener hijos era una vergüenza terrible. Era el fracaso final. Cuando uno elegía esposa lo hacía con ese propósito y sólo con ese propósito, el Amor y el afecto tenían muy poco que ver con eso.

Es por eso que las viudas en la Escritura están consideradas como las personas más lamentables. Estas mujeres podrían haber sido muy jóvenes cuando perdieron a sus maridos en la guerra, por un accidente o una enfermedad, pero , como "material de segunda mano", ellas no eran elegibles para un nuevo matrimonio y por tanto no podían ser madres. Ser madre de un hijo es a lo que las mujeres estaban destinadas a ser. Una mujer que no podía ser madre tenía menos valor que una persona.

En las Escrituras - tanto en el Antiguo y Nuevo Testamento los nacimientos de personas significativas ocurren en circunstancias que apuntan fuertemente a algún tipo de intervención divina. Hay en la Biblia una serie de incidentes en que las mujeres de edad avanzada que nunca habían tenido hijos son, a través de la intervención de Dios, bendecidas con descendencia, por lo general un hijo. Así que aquí, también, la esterilidad de Isabel se ve menos como una maldición que como una preparación para algo especial.

Como vemos, la primera lectura de hoy relata uno de ellos - el nacimiento de Sansón. Lo peculiar de todas estas historias es que el niño por nacer tiene un papel muy especial dado por Dios. Así pues, en la lectura de hoy, también, hay un signo de la intervención de Dios en el nacimiento de Juan el Bautista. Él no es un niño común y corriente. Él ha sido elegido con un propósito muy especial, para ser el precursor de Jesús, el último de los grandes profetas de la Alianza hebrea.

Este inicio del evangelio de Lucas es una suerte de díptico con historias paralelas que anuncia el nacimiento de Juan el Bautista y Jesús. No se trata aquí de la historia literal, aunque Lucas pone la historia en un contexto verdaderamente histórico ", en los días de Herodes, rey de Judea". Lucas escribe a imitación del Antiguo Testamento, mezclando hechos históricos y leyendas. Así que no preguntemos: ¿Todo esto suceda exactamente como se describe? Más bien, nos preguntamos, ¿qué significa? Y sobre todo es parte de la respuesta a otra pregunta: ¿Quién es Jesucristo?

En la historia de hoy tenemos la clásica situación de la mujer de edad avanzada que no tiene hijos. Entonces, un día, el marido, Zacarías, miembro de la casta sacerdotal habla con un ángel mientras servía en el Templo. El nacimiento de un hijo se le anuncia y su destino. Él no tocará bebidas fuertes (como Sansón) y será lleno del Espíritu de Dios, incluso antes de su nacimiento. Él será la fuente de muchos para que encuentren su camino de regreso a Dios. Zacarías responde con cierto escepticismo y es castigado con la mudez por su incredulidad. Sin embargo, después de esta experiencia, Isabel concibe un hijo.

El escenario está listo para lo siguiente, y más importante, la Anunciación de María.

Hoy en día, vamos a reflexionar seriamente sobre nuestro propio llamado por Dios. Al igual que Juan, cada uno de nosotros ha sido llamado a ser un precursor de Jesús, para preparar el camino para que Jesús entre en las vidas de otros, especialmente aquellos que aún no han tenido la experiencia de conocerlo.


La edición y el subrayado son nuestros
Tomado de Living Space, commentaries on the dayli readings  

En este día, descubramos como es el amor del Señor que está atento siempre a nuestros sufrimientos y lo único que espera es que no dudemos de él. 

Que la misericordia y la confianza en el Señor no les falte.

Gracias














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